miércoles, 17 de junio de 2009

Para ir me de viaje


Para irme de viaje necesito muchas cosas
entre ellas dos pares de besos
que les daré a mis sahuesos
también un frasco de felicidad
que compartiré con soledad.
cuatro o cinco recuerdos
como por ejemplo mis soldados,
no puede faltar una bolsa de de sonrisas
porque es muy bueno no tener prisas.
un paquete de abrazos
y las ligas del zapato para hacer lazos,
y también llebaré un libro interminable
por que soy incansable.


daniel dominguez barrios

viernes, 20 de marzo de 2009

el cuervo y lazorra

Un cuervo tenía un trozo de queso en el pico . una zorra se le acerco a él y le dijo:
-tienes una voz preciosa.¿por que no cantas algo?
el cuervo abrió el pico para cantar y el queso se le cayó . La zorra cogió el queso y huyó.
-Que tonto he sido-pensó el cuervo muy apenado.-Y qué vanidoso.

viernes, 16 de enero de 2009


Nada en el mundo es mas peligroso que la ignorancia sincera y la estupidez conciansuda.

La PAZ

Nosotros queremos la PAZ
nos falta mucho más,
que con la violencia no se cumple la PAZ.
Viva la PAZ,
la Paz os doy
pero soy capaz
de cumplirlo hoy.
Queremos la PAZ
una vez más
Nosotros queremos la PAZ
nos falta mucho más,
que con la violencia no se cumple la PAZ.
Viva la PAZ,
la Paz os doy
pero soy capaz
de cumplirlo hoy.
Queremos la PAZ
una vez estando riendo
y cantando.
¡Ay qué bonita es la PAZ!
Algunos no la saben respetar.
¡Ay qué bonita es la PAZ!
Todos los días al despertar.
.

Javier L. 6º EP
.


.

lunes, 15 de diciembre de 2008

CENA DE NOCHEVIEJA


Judias verdes
con suspiros
y huevos de
arroz,
pan y almendra,
purè de papas y
villancicos.
Los regalos y
petardos con
fuerte sonido
y extallidos.
Bombones de
chocolate con
turròn y
mazapàn.

martes, 9 de diciembre de 2008

Anécdotas históricas: "Cría cuervos...."

Este famoso refrán cobra verosimilitud con Eduardo VIII de Inglaterra, duque de Windsor, tras su abdicación en 1936.

Este hombre que abandono un trono por amor, fue incapaz de mostrar gratitud hacia Walter Monckton, su asistente personal, que no dudó en seguirle al exilio cuando contrajo matrimonio con la divorciada estadounidense Wallis Simpson. Tras más de treinta años a su servicio, a la hora de su jubilación, el duque de Windsor se limitó a regalarle una pitillera... Y por si fuera poco, ¡con su nombre escrito mal!


Historia y Vida, noviembre del 2005.